La limpieza de tapizados no tiene porque ser un trabajo arduo y complicado; en muchas ocasiones lo puedes hacer tu mismo si tienes la precaución de tratar cada material como se debe. Puedes seguir los siguientes consejos para limpiar tapicerías de todo tipo; aunque es recomendable que antes de ponerte a limpiar cualquier tapicería mires la etiqueta en la que viene la información de lavado.
¿Como mantener una tapicería en buen estado?
En primer lugar; es importante tener en cuenta que cualquier tapicería debe mantenerse correctamente. Un aspirador con el accesorio adecuado es siempre la mejor manera de mantener tu tapicería libre de polvo y suciedad. Aspirando regularmente tus sofás, cabeceros tapizados y cualquier elemento de tapicería estarás minimizando el tener que aplicar otros métodos de limpieza mas complejos y agresivos con el material.
En el caso de tapicerías de piel debes seguir el mismo consejo de aspirar regularmente; pero ademas es recomendable pasar un paño húmedo para eliminar cualquier mancha que se pueda formar. Si la tapicería es de piel natural infórmate correctamente del tipo de piel que es e hidrátala frecuentemente con productos especiales para ello.
¿Como tratar manchas en la tapicería?
A la hora de actuar sobre manchas en un elemento de tapicería no hay que precipitarse. Si se trata de manchas de grasa o líquido debemos actuar de inmediato poniendo papel absorbente para retirar la mayor cantidad de líquido posible. No se trata de frotar la tapicería; esto solo extenderá la mancha; hay que presionar ligeramente para que el papel absorba sin extender la mancha.
Un buen truco para manchas líquidas o de grasa es verter sal gorda en una buena cantidad sobre la mancha; dejar que actúe absorbiendo el líquido durante unos minutos y después aspirar el restante. Este método no acabara del todo con la mancha; pero nos ayudará a eliminarla fácilmente más adelante.
Para tratar manchas que ya se han secado hemos de mirar primero si existe la posibilidad de quitar las fundas y lavarlas en la lavadora; o llevarlas a una tintorería. Si es así resultará sencillo eliminar la mancha. Simplemente hemos de tener cuidado de lavar siguiendo el etiquetado y dejar secar totalmente antes de volver a poner la funda en su lugar. Puedes aplicar sobre la mancha algún producto quitamanchas comercial; sigue cuidadosamente las instrucciones del fabricante y comprueba que sea apto para tratar tapicería.
Si no existe posibilidad de retirar las fundas te verás obligado a tratar la mancha en seco. Para esto existen espumas especiales que actúan sobre la zona de la mancha y suelen dar muy buenos resultados. Es preferible probar primero cualquier producto que vayas a aplicar sobre una zona de la tapicería que no se vea; sobre todo en tapicerías de colores llamativos; ya que el color puede verse devastado por el producto.
¿Qué hacer con las manchas difíciles de la tapicería?
Para las manchas de grasa puedes usar una solución de amoniaco y agua tibia al 50%. Aplícalo sin empapar la superficie y frota ligeramente con un cepillo de tapicero. Es un método que requiere de trabajo pero da buenos resultados.
Las manchas sólidas como la cera, el esmalte de uñas o el chicle deben eliminarse con frío seco. Aplica hielo envuelto en un paño para endurecer todo lo posible la mancha y después frota con un cepillo para erosionar poco a poco la sustancia que sea. Después solo tienes que aspirar los restos; si queda cualquier clase de cerco tendrás que tratarlo aparte; pero ya habrás solucionado la peor parte del problema
Si vas a lavar en la lavadora las fundas de una tapicería debes utilizar siempre jabón para prendas delicadas, poner el programa corto y lavado en agua fría para evitar que encoja la tapicería y luego no puedas volver a colocarla en su sitio.
Por último, para evitar que queden marcas o cercos después de tratar una mancha en la tapicería; lo más recomendable es sencillamente aplicar un lavado sencillo a toda la superficie. Así el acabado será uniforme y el aspecto inmejorable.
